El pulgón es una de las plagas más comunes de los cultivos de cannabis que posee un gran potencial destructivo debido en gran parte a que son insectos “sociales” y viven en colonias de decenas y cientos de individuos, por lo que invaden literalmente nuestro cultivo.
Si nuestras plantas de marihuana han sido invadidas por el pulgón, existen algunos remedios que podemos utilizar para erradicarlos. No constituye una de las plagas más difíciles de eliminar aunque si no lo controlamos, puede causar daños irreversibles en nuestro cultivo.
- 1 ¿Qué es el Pulgón? ¿Cómo reconocerlo o identificarlo de forma visual?
- 2 Peligros de tener una plaga de Pulgón en nuestro cultivo
- 3 ¿Cómo combatir el Pulgón? Los mejores métodos para eliminarlo
- 4 ¿Cómo prevenir el Pulgón y evitar que aparezca?
- 5 Pulgón en fase de floración: qué hacer y qué no hacer
- 6 ¿Puedo fumar cogollos de marihuana con pulgón?
¿Qué es el Pulgón? ¿Cómo reconocerlo o identificarlo de forma visual?

El pulgón o áfido es un insecto perteneciente a la familia Aphidoidea de la orden de los hemípteros. Se trata de pequeños insectos de entre 1 y 10mm de diferentes colores, predominando el verde, amarillo, negro y pardo. A diferencia de otras plagas como la mosca blanca, el Pulgón no deja marcas de picaduras pero se le puede localizar fácilmente con una inspección de la planta.
Su aspecto es redondeado y su cuerpo se divide en tres partes: cabeza, tórax y abdomen. Existen pulgones sin alas o ápteros y alados y están provistos de un aparato bucal succionador a través del cual se alimentan chupando la savia de la planta. Se reproduce rápidamente por lo que si no estamos atentos probablemente nos demos cuenta de su presencia cuando la planta esta ya invadida.
Daños visuales en la planta de cannabis
Los síntomas claros de una infestación de pulgón incluyen hojas retorcidas o arrugadas, la aparición de puntos amarillos en las hojas, un crecimiento lento y debilitado de la planta, así como una superficie pegajosa provocada por la melaza que segregan estos insectos. Además, es habitual que aparezca moho negro o negrilla sobre esa sustancia pegajosa y que se observe la presencia constante de hormigas subiendo por el tallo. Si ves hormigas de forma continua sobre la planta, casi con total seguridad hay pulgón.
Dónde suelen esconderse los pulgones
Los pulgones suelen esconderse en las zonas más tiernas y protegidas de la planta, donde la savia circula con mayor fuerza. Principalmente se concentran en el envés (parte inferior) de las hojas de la marihuana, en los brotes nuevos, en las puntas de crecimiento, a lo largo de los tallos jóvenes y en las uniones entre tallo y rama. En infestaciones avanzadas también pueden aparecer en los cogollos y, en algunos casos menos comunes, en la zona de las raíces (especialmente en cultivos en maceta). Estas ubicaciones les permiten alimentarse con facilidad y pasar más desapercibidos durante los primeros días.

Peligros de tener una plaga de Pulgón en nuestro cultivo
Los daños que causa el pulgón pueden ser, como en la mayoría de plagas, derivados directamente de sus ataques o provocados de manera indirecta por la presencia de esta plaga. Tener una plaga de pulgón en el cultivo supone un riesgo serio para la salud, el desarrollo y la producción de las plantas de marihuana.
Daños directos:
La succión de la savia provoca un debilitamiento general de la planta, la aparición de manchas amarillas en las hojas y la deformación de los tallos y brotes que afecta a la producción final de la planta. Al alimentarse de la «sangre de las plantas», los pulgones debilitan rápidamente el cultivo de cannabis, frenando su crecimiento y reduciendo su vigor general, lo que se traduce en menores cosechas y cogollos de peor calidad. Toda una catástofre.
Daños indirectos:
Los daños indirectos que puede provocar el Pulgón en nuestro cultivo derivan principalmente de la melaza que segregan que, por un lado, sirve como alimento a los hormigas, aumentando las posibilidades de sufrir una plaga de hormigas en nuestro cultivo. Por otro lado, fomenta la aparición de hongos que atacan al cannabis como el tizne o negrilla que reducen de manera significativa la capacidad de fotosíntesis de la planta afectando enormemente en la cosecha, crecimiento y calidad de los cogollos.
Además, por si todo esto fuera poco, el Pulgón puede actuar como vector transmitiendo virus a la planta (puede transmitir hasta 117 virus diferentes) sobre todo la especie de Pulgón alado.

¿Cómo combatir el Pulgón? Los mejores métodos para eliminarlo
Si no hemos llegado a tiempo o la prevención no ha sido suficiente y ya tenemos la plaga instalada en nuestro cultivo, existen algunos métodos que podemos utilizar para eliminar el Pulgón de nuestras plantas. Como siempre, se recomiendan los métodos ecológicos que son respetuosos con el medio ambiente y con nuestra propia salud.
- Control físico: colocar trampas adhesivas cromáticas amarillas nos ayudará a atrapar los pulgones alados y facilitará su detección.
- Control biológico: al igual que las demás plagas, introducir depredadores naturales del Pulgón en el cultivo ayuda a erradicar la plaga. Los principales depredadores de este insecto son los parasitoides del género Aphidius, la Chrysoperla carnae o la Coccinella septempuntata, también podemos utilizar el hongo Verticillium lecanii.
- Eliminarlo manualmente: es una técnica bastante primaria pero si nos armamos de paciencia podemos eliminar gran parte de la población adulta a mano ya que son fácilmente visibles. Esta técnica debería combinarse con otro método que ayude a erradicar la plaga definitivamente.
- Aceite de Neem y jabón potásico: además de utilizarlos como preventivo puede utilizarse para tratar la plaga y eliminar los pulgones. Podemos aplicarlo pulverizando la mezcla diluida en agua o aplicarlo con la ayuda de una esponja.
- Infusiones de ajo, cebolla, ajenjo o tanaceto sirven tanto para prevenir como para tratar la plaga.
- Purín de ortigas: para utilizarlo como tratamiento contra el pulgón solo debemos modificar la mezcla.
- Nicotina: podemos hacer un insecticida casero diluyendo tabaco en agua y pulverizando sobre las plantas ya que la nicotina es uno de los componentes que utilizan muchos insecticidas.
- Si hay presencia de hormigas subiendo por la planta, casi con total seguridad el problema será persistente si no se corta también esa vía, ya que las hormigas protegen a los pulgones para alimentarse de su melaza.
Como última opción por ser perjudicial con el medio ambiente y con nuestra salud, siempre que las especiales circunstancias de la plaga lo aconsejen y NO estemos en la etapa de floración, podemos utilizar insecticidas químicos para acabar con el pulgón.

¿Cómo prevenir el Pulgón y evitar que aparezca?
Como con cualquier otra plaga, lo más importante es prevenir su aparición para evitar los daños que pueda causar este insecto aunque terminemos acabando con él. La prevención es más efectiva y a la larga más económica y menos trabajosa que la erradicación de la plaga. Podemos utilizar diferentes técnicas que nos ayudarán a prevenir la aparición de esta plaga:
- Examinar frecuentemente nuestras plantas: es la mejor manera de detectar alguna anomalía y buscar una solución a tiempo. La detección rápida es fundamental a la hora de combatir una plaga.
- Aceite de Neem: es un preventivo natural 100% ecológico que además de protegernos contra el pulgón, lo hará contra muchas otras plagas como la araña roja.
- Cultivar plantas aromáticas que los repelen como menta, cilantro, albahaca, ajo, melisa, romero o lavanda entre otras.
- Otra opción es cultivar plantas que atraen a los depredadores del Pulgón como el eneldo, la maravilla o la borraja.
- Infusiones de ajo, ajenjo, cebolla o cola de caballo para utilizar como repelentes.
- Purín de ortigas: tiene efecto insecticida y es 100% ecológico. Nos sirve como preventivo para repeler el pulgón y también podemos utilizarlo para tratar la plaga una vez infestados. Además de insecticida, favorece el crecimiento y fortalece el sistema inmunológico de la planta.
- Infusión de Tanaceto: su alto contenido en piretrinas lo convierte en un insecticida natural y ecológico indicado para evitar el ataque del pulgón y otras plagas.
- Retirar las malas hierbas de alrededor de nuestros jardines y lugares de cultivo que pueden favorecer la aparición de esta plaga.
- El extracto de Laurel como insecticida también ayudará a controlar y prevenir la presencia del pulgón en plantas de cannabis.
- Mantener nuestra zona de cultivo limpia y desinfectada también ayudará a prevenir los ataques de cualquier plaga.
Pulgón en fase de floración: qué hacer y qué no hacer
El pulgón en floración es una de las situaciones más delicadas que puede afrontar un cultivador. A diferencia de la fase de crecimiento, en este momento ya no se puede actuar con la misma libertad, porque cualquier producto aplicado sobre la planta puede terminar acumulándose en los cogollos. Lo primero y más importante cuando se detecta pulgón en floración es actuar con rapidez, pero sin impulsividad. Cada día que pasa sin control la colonia crece de forma exponencial.
En floración temprana rociar algún producto suave y seguro
En cuanto al tratamiento, en floración solo deben utilizarse productos muy suaves y seguros, siempre con extrema precaución. El jabón potásico es una de las herramientas más utilizadas porque actúa por contacto y no deja residuos tóxicos. El aceite de neem puede ser útil solo en las primeras semanas de la fase de floración del cannabis. El uso de depredadores y lucha biológica como las mariquitas también puede ser una solución para matar al pulgón sin dañar los cogollos.
En últimas semanas de flora parar el uso de cualquier producto
Cuando la planta ya está en las últimas semanas de floración, la estrategia debe cambiar por completo. En esta fase ya no es buena idea pulverizar con productos líquidos, ni siquiera los más suaves. Aquí se prioriza la retirada manual, la poda selectiva de las zonas afectadas y el control del ambiente. Cuando un cogollo está completamente colonizado, por muy doloroso que sea, lo más sensato suele ser eliminarlo.

¿Qué no hacer nunca en floración?
- No usar insecticidas químicos sistémicos. Estos productos son absorbidos por la planta y terminan acumulándose dentro del cogollo. Eso significa que después se inhalan al consumirlo, con riesgos muy serios para la salud.
- No empapar las flores por desesperación. La humedad retenida en los cogollos crea el escenario perfecto para la aparición de moho y botrytis, pudiendo arruinar la cosecha o el corte final en pocos días.
- No mezclar productos sin criterio. Pensar que “cuanto más, mejor” es un error muy común. Las mezclas mal hechas pueden quemar los pistilos, bloquear la transpiración de la planta y afectar gravemente a la calidad final.
- No ignorar la presencia de hormigas. Mientras sigan subiendo por el tronco, el pulgón casi siempre volverá, aunque se elimine varias veces. Es imprescindible cortar su acceso con barreras físicas o cebos específicos.
- No cosechar sin revisar bien los cogollos si ha habido pulgón. Pueden quedar restos de melaza, huevos o pequeños individuos ocultos entre las flores, comprometiendo la seguridad y la calidad del producto final.
¿Puedo fumar cogollos de marihuana con pulgón?
Respuesta corta y clara: no es recomendable fumar cogollos con pulgón, y en muchos casos es directamente desaconsejable, sobre todo si hay melaza, hongos o restos visibles de la plaga. Si hay poco pulgón puede no pasar nada malo o incluso podríamos limpiar los cogollos con agua y un poco de bicarbonato muy diluido. Pero en infestaciones de pulgón graves lo mejor será cuidar nuestra salud y desecharlos por completo.
Cuando un cogollo tiene pulgón, no solo hay insectos visibles. También hay melaza, excrementos, huevos microscópicos y, muchas veces, hongos. Todo eso acaba siendo inhalado al fumar, y aunque no siempre produce efectos graves inmediatos, sí puede causar irritación fuerte de garganta y pulmones, tos persistente, mal sabor muy agresivo e incluso infecciones respiratorias en personas sensibles.



