Los efectos beneficiosos de la marihuana en pacientes con glaucoma se conocen desde hace prácticamente 5 décadas. En la actualidad muchos pacientes que sufren glaucoma piden a su oftalmólogo información sobre este tratamiento.
La historia conjunta del glaucoma y la marihuana se inició en 1971, momento en el que se descubrieron las primeras evidencias sobre los beneficios del cannabis. Ya en el 1975, Robert Randall, un paciente de glaucoma utilizó marihuana para tratar el glaucoma. Este caso es muy famoso ya que fue el primer caso en que un paciente se enfrentaba a cargos criminales por cultivar marihuana para un tratamiento médico y ganaba el caso alegando necesidades médicas.
En la actualidad, una gran cantidad de estados y países han legalizado la marihuana con fines terapéuticos.
cannabis y glaucoma
¿Es beneficiosa la marihuana en pacientes de glaucoma?
Está demostrado que la marihuana reduce la presión intraocular (PIO) entre un 60% y un 65% de los pacientes con glaucoma. De hecho, según las investigaciones más reciente, la reducción media de la presión intraocular es de aproximadamente el 25%. La duración de dichos efectos es corta, entre 3 a 4 horas aproximadamente. Además, existe una relación directa entre la dosis consumida y sus efectos sobre el paciente, pero no en el tiempo de duración de dichos efectos. Por último, señalar que el método más eficaz es mediante un porro o vaporizador, es decir, inhalando.
El Cannabis no es la solución ideal
El problema principal es que los efectos beneficiosos de la marihuana terapéutica sobre los efectos negativos del glaucoma en el organismo se prolongan poco en el tiempo, obligando al paciente a consumir aproximadamente diez porros al día para controlar los efectos del glaucoma las 24 horas del día. Esta cantidad de marihuana consumida hace que sea difícil para el paciente desarrollar sus actividades laborales y recreativas con total normalidad. Además, los gastos económicos pueden ser muy elevados.
El efecto que reduce la presión ocular y ayuda a las personas con Glaucoma no dura más de 4 horas, provocando un consumo excesivo y poco saludable. Un consumo tan elevado y crónico puede causar cambios en el estado de ánimo de los consumidores e impedir hacer cosas cotidianas como conducir o trabajos con maquinaria peligrosa. Estas limitaciones han llevado a las principales organizaciones oftalmológicas a posicionarse en contra del uso de la marihuana en el tratamiento del glaucoma y a favor del uso de medicamentos ya disponibles en el mercado farmacéutico.
Algunos efectos secundarios
El consumo de marihuana tiene un número significativo de efectos secundarios en algunos pacientes como taquicardias o disminución de la presión arterial, lo que se traduce en una reducción del flujo sanguíneo en un nervio óptico ya comprometido por la enfermedad. Además, el consumo de cannabis a largo plazo puede producir enfermedades pulmonares, cierta dependencia y desarrollo de la tolerancia.
ojo con marihuana
Métodos de consumo probados
La técnica más común a la hora de ingerir cannabinoides es mediante la combustión y el fumar. Debido a las complicaciones clínicas que esto conlleva, se ha investigado otras formas de consumo para tratar la glaucoma. Por ejemplo, se ha testado con gotas ricas en THC sobre los ojos, y aunque reducían los efectos del glaucoma, provocaba picores e irritación.
Otro método utilizado fueron las típicas gotas sublinguales de THC. Su consumo es sencillo y rápido ya que únicamente hay que poner un par de gotas debajo de la lengua. El problema es que los pacientes sufrían de somnolencia y efectos psicoactivos potentes y poco compatibles con un tratamiento que debe ser crónico.
Estudios realizados
En la década de 1970, el Dr. Robert Hepler y la Dra. Ira Frank, de los Ángeles, realizaron un estudio sobre los efectos del THC en el ojo, y se descubrió, por casualidad, que la presión intraocular se reducía una media del 25%.
Se realizó un experimento en el que pacientes con Glaucoma comenzaron a consumir THC para su tratamiento. Aunque la mayoría notó mejoras, son tales los efectos secundarios que el 100% de los participante optó por dejar de consumir marihuana transcurridos los 9 meses.
Por lo tanto, a los pacientes con Galucoma nos tocará esperar a que los científicos encuentren la forma ideal de suministrar THC al globo ocular para bajar su presión pero que a su vez no se cause ningún tipo de efecto secundario indeseado.
En España también se ha realizado alguna investigación respecto al tema. El departamento de Biología Celular e Histológica de la facultad de Medicina de la Universidad del País Vasco (UPV/EHU) y su grupo de Oftalmo-Biología Experimental tienen sus propias conclusiones que pueden ser consultadas en este enlace.
Conclusiones
De todos modos, aunque pueda ser menos efectivo que algunos fármacos y sus efectos sean menos prolongados, hay muchos pacientes que prefieren declinarse por tratamientos más naturales como el consumo de cannabis. Desde Gea Seeds señalamos que puede resultar conveniente tratar el tema con nuestro oftalmólogo para tener la opinión de un profesional. Esperamos que el artículo os haya servido de ayuda y ya sabéis, si tenéis alguna duda, no dudéis en dejar vuestro comentario.
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