La Organización Mundial de la Salud, la máxima autoridad de salud en el mundo, hizo una recomendación oficial el 14 de diciembre de 2017 en la que clasificaba el CBD o cannabidiol, principal compuesto del cannabis medicinal, como sustancia no incluida dentro de la lista de sustancias sujetas a fiscalización internacional.
Enlace al artículo de la OMS: https://www.who.int/features/qa/cannabidiol/es/
En dicha recomendación se señala que el CBD, y por tanto la marihuana medicinal, ayuda a los pacientes a paliar las molestias causadas por enfermedades crónicas y a aquellos que padecen epilepsia u otros trastornos nerviosos.
¿Qué repercusión tiene esta noticia?
El hecho de que se considere el cannabidiol o CBD como una sustancia sin riesgos para la salud, hace que no deba ser considerad una droga; más aún si se tiene en cuenta que no genera adicción alguna.
Esta noticia se suma a la fuerte inercia social en pro de la legalización y regularización de la marihuana, no solo a nivel medicinal sino también recreativo. Cada vez son más los países que legalizan la marihuana medicinal, y muchos otros la están legalizando a todos los niveles, como Canadá, Uruguay o algunos estados de Estados unidos.
Ahora bien, esto no significa que la OMS recomiende el consumo de cannabis medicinal ya que, según señalan, necesitan más datos y estudios; pero lo que sí que rechazan, es que sea considerada una droga sin valor medicinal.
La noticia supone un nuevo avance en el estudio y la regularización mundial de la planta. Obviamente, cuantos más organismos oficiales se posiciones a favor de su uso y estudio, más cerca estamos todos de poder disfrutar de los beneficios de esta planta perseguida y criminalizada.
Retirada de la lista de drogas peligrosas
La Organización Mundial de la Salud ha propuesto a la Organización de las Naciones Unidas (ONU) que rebaje la fiscalización con la intención de regular legalmente la producción y consumo de la marihuana con uso medicinal. Actualmente el Cannabis se encuentra en la Lista IV de la Convención de Estupefacientes de 1961, lo que provoca su definición como droga peligrosa y limita el trabajo y estudios que se puedan realizar sobre ellas. Esta clasificación está cambiando y se espera una reducción de prohibiciones en todo el planeta, lentamente pero firme. Con este cambio de categoría lo principal que se logra son avances médicos, el uso recreativo de los porros sigue intacto en su definición.
Paso a la lista I de drogas
El paso de la Lista IV a la I puede parecer insignificante pero es un cambio de rumbo brutal. Según la convención de drogas, la Lista I lleva drogas con las que se permite su investigación. Por lo tanto, en cuanto el Cannabis pase a esta sección se producirán nuevos estudios y prácticas en laboratorios para tratar de averiguar sus beneficios tratando según qué enfermedades.
AVISO MEDICO LEGAL
Soy usuaria medicinal me parece una excelente noticia.